Certificado de acciones De Dion-Bouton, 1930, mayor fabricante de automóviles del mundo en 1900, con cuponera completa

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Certificado de acciones de Établissements De Dion-Bouton

• Fecha de emisión: 1 de febrero de 1930.
• Emitido por: Établissements De Dion-Bouton, una de las empresas más emblemáticas en la historia de la automoción.
• Denominación: Décimo de Parte Beneficiaria al Portador, sin valor nominal.
• Capital social: 6,000,000 de francos, dividido en 24,000 acciones de 250 francos cada una.
• Sede social: 36, Quai National, Puteaux, Sena (Francia).
• Diseño:
• Certificado impreso en rojo y azul con ornamentaciones decorativas y el logotipo de De Dion-Bouton.
• Incluye cuponera completa, con cupones numerados del 23 al 40 para la reclamación de dividendos.
• Firmado por el administrador y delegado del Consejo de Administración.

Contexto histórico

Établissements De Dion-Bouton fue un destacado fabricante francés de automóviles, motores y vehículos de transporte a finales del siglo XIX y principios del XX. Fundada en 1883 por el marqués Jules-Albert de Dion, Georges Bouton y Charles-Armand Trépardoux, la empresa se destacó por su innovación y calidad. A principios del siglo XX, llegó a ser el mayor fabricante de automóviles del mundo, produciendo 4,000 vehículos anualmente en 1900.

En la década de 1920, De Dion-Bouton comenzó a enfrentar crecientes desafíos debido al avance de los métodos de producción en masa adoptados por otros fabricantes, que ofrecían vehículos más accesibles. En 1927, la fábrica cerró durante un período significativo. Con su reapertura, la empresa intentó resurgir introduciendo dos nuevos modelos:

• Tipo LA: Motor de cuatro cilindros y 1982 cc.
• Tipo LB: Motor de ocho cilindros en línea de 2496 cc, posteriormente ampliado a 3 litros en 1930.
• A pesar de estos esfuerzos, el modelo LB resultó demasiado costoso y tuvo pocas ventas.

El certificado de acciones de 1930 se emitió durante este intento de revitalización, en medio de una industria automotriz golpeada por la crisis económica de 1929. Sin embargo, los desafíos financieros y la falta de adaptación al mercado llevaron a que la producción de automóviles de pasajeros cesara en 1932.